La jugadora guipuzcoana Nely Carla (1983) pone fin a su carrera como jugadora de balonmano, pero ello no quiere decir que abandone este deporte, ya que se integra en el organigrama del Bera Bera cuya camiseta defendió en un momento de su dilata carrera, justo al principio antes de firmar por Ribarroja e Itxako. El camino está lleno de experiencias, buenas y malas. Desde la medalla de los JJ.OO de Londres hasta el infierno que supone la aparición de largas lesiones. Pudo con todo, peleó hasta lo imposible para seguir y seguir viviendo con pasión un deporte que ha practicado preferentemente en Francia. Allí llegó en 2010, firmando en el Havre que entrenaba entonces Frederic Bougeant, un técnico que le marcó con su forma de hacer y decir. De Normandia, dos años después alcanza a Fleury, siguiendo al técnico que también cambiaba de aires.
Luego, Los nombres de Mios Biganos-Begles, Brest, Chambray y Merignac aparecen su su biografía. Lo mismo que el año 2019 en el que interrumpió la carrera por maternidad. A la referida medalla de bronce olímpica y una de plata en un mundial, en su palmarés figura una Copa EHF con el desaparecido Itxako, dos ligas españolas, dos Challenge Cup (Le Havre y Mios), dos Copas de Francia (Fleury y Brest). Por supuesto, la trayectoria con la selección española presenta números de jugadora importante al haber disputado 136 partidos y marcado 346 goles desde su posición de lateral izquierdo.
Está en posesión del título de entrenadora, papel que desempeñó en el Merignac (2019) como adjunta al primer técnico. Ese es el punto de partida para su actividad futura. Presentada en Bera Bera aseguró que “Siempre es un placer volver a casa. Quiero aportar mi experiencia y aspiro a ser un apoyo y referente para las jugadoras” Comienza su andadura en Bidebieta como segunda entrenadora del equipo filial.
En una amplia carta de despedida, compartida en redes sociales, ha agradecido a todas las personas con las que ha compartido proyectos. Extractamos por ejemplo: “Gracias a todos los clubes de los que he formado parte. En especial al Bera Bera, por darme la oportunidad de conocer este mundo y a Frederic Bougeant y toda su familia por hacer posible el inicio de mi carrera en Francia que ha durado 13 años”.
Y se despide en la misma línea: “Gracias a toda la gente con la que he compartido este viaje tan importante en mi vida (aficionados, voluntarios, sponsors, dirigentes, entrenadores, jugadoras…)”